7/11/08

Lobo negro y lobo blanco.

Como dos lobos
en un bosque siniestro,
hermanos de una misma Luna,
alumnos de ningún maestro;
con el hambre del que ayuna,
con el dolor del desencuentro.

Fuimos compañeros
de cacerías sin fortuna,
le escapamos a las jaulas
persiguiendo la locura
de convertir el cruel bosque
en una pradera de ternura.

Casi como hermanos
nuestros colmillos se apretaron
ante las mismas decepciones
que con furia nos llevaron
a aullar como enloquecidos
y a no ser domesticados.

Pero se nos vino encima
la realidad, el bosque y la vida.
En una jaula te metiste
ahora sos perro policía,
yo estoy más viejo y más hambriento
y sigo aullando utopías.