El toro ya esta herido,
la muerte lo acaricia,
la piedad no ha venido
en el filo de esa espada.
Y va derramando vida
en la arena ensangrentada.
El torero sonríe,
la gente más se excita.
Erradas embestidas
en cuernos de justicia.
El morbo y la agonía
al público envicia.
El toro no se rinde,
instinto de guerrero,
el torero lo mide
burlándolo en el ruedo.
Quién será la bestia?
preguntan en el cielo.